¿Qué son los créditos de carbono?

Los créditos de carbono son permisos que permiten al propietario liberar una determinada cantidad de carbono u otros gases de efecto invernadero.
La compra de un crédito de carbono permite a una empresa generan una tonelada de emisiones de carbono.

¿Por qué son importantes los Créditos de Carbono?

Una de las primeras preguntas que se hacen al oír hablar de los créditos de carbono es ¿por qué son importantes?
Después de todo, ¿no son sólo «trozos de papel»?
Para responder a esta pregunta, primero tenemos que investigar cómo se crean los créditos de carbono.

Cómo se fabrican los Bonos de Carbono.

En todo el mundo hay numerosos proyectos que han obtenido la certificación de reducción de emisiones de carbono.
Cada proyecto ha tenido que superar una rigurosa revisión por parte de una de las destacadas entidades de certificación mundiales.
Algunas de estas entidades con las que trabajamos son las siguientes:

1. Registro Verra: https://registry.verra.org/
2. Registro Americano del Carbono: https://americancarbonregistry.org/
3. El Registro Climático: https://theclimateregistry.org/
4. Estándar de oro: https://www.goldstandard.org/

Una vez certificado, cada proyecto cualificado tiene derecho a reclamar un determinado número de toneladas de emisiones de carbono que compensará.
En este punto, cada proyecto tiene que tomar una decisión: conservar estos derechos u optar por venderlos.
Muchos, si no la mayoría, optan por vender estos derechos en el mercado mundial para dar mayor valor a su proyecto original.
Así es como se crea un crédito de carbono y se pone a la venta.
En conclusión, ¿es un crédito de carbono simplemente una hoja de papel?
En cierto sentido, sí.
Pero en otro sentido, los créditos de carbono son mucho más.

Créditos de carbono: algo más que «trozos de papel».

Esas hojas de papel significan una buena inversión para tu empresa.
En primer lugar, los créditos de carbono implican una inversión financiera masiva por parte de una empresa de desarrollo para idear proyectos que reduzcan las emisiones de carbono.

Después, exigen una enorme inversión de tiempo para que una entidad de certificación revise estos proyectos.
La entidad de certificación determina si el proyecto cumple unas directrices estrictas para reducir las emisiones de carbono y le asigna un valor en función de la cantidad de carbono que reduce o «compensa».
A continuación, la comunidad comercial realiza una enorme inversión de tiempo para investigar y comercializar el valor de estas reducciones o compensaciones de carbono.
Por último, estas reducciones se ponen a disposición del empresario para su compra como créditos de carbono.
Los créditos de carbono compensan o reducen la cantidad de emisiones de carbono que produce tu empresa.
Al comprar créditos de carbono, estos «trozos de papel» pueden ayudar a tu empresa a lograr la neutralidad de carbono, y eso es una buena inversión.
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